La detección temprana es uno de los principales factores que permiten reconocer la presencia de cambios o síntomas en nuestro cuerpo. Cuando hablamos de cáncer las posibilidades de cura aumentan al reconocer esos cambios en sus etapas iniciales

Es fundamental concurrir a los controles anuales para realizar estudios que colaboran con el diagnóstico precoz. Cáncer no debe ser sinónimo de dolor y muerte ya que más de la mitad de las personas afectadas por estas problemáticas se curan y en otros casos, las personas pueden tener una buena calidad de vida.

El cáncer puede PREVENIRSE, TRATARSE y CURARSE.

Hábitos que ayudan a reducir el riesgo

• No fumar
• Evitar el consumo problemático de alcohol
• Comer y beber de forma sana
• Mantener un peso saludable para evitar la obesidad
• Realizar actividad física a diario
• No exponerse al sol sin los cuidados necesarios.
• Vacunarse contra la hepatitis B y el virus del papiloma humano (HPV)
• Realizar estudios de control (PAP, mamografía, colonoscopía).

Aproximadamente un tercio de las muertes por cáncer tienen su origen en el tabaquismo, los altos índices de masa corporal, el abuso de alcohol, la baja ingestión de frutas y verduras, y la falta de actividad física. Las variantes más comunes a nivel mundial son el cáncer de mama (2,26 millones de casos); pulmonar (2,21 millones), colon y recto (1,93 millones), seguidos por próstata, piel y estómago.

Cada 4 de febrero se celebra el Día Internacional del Cáncer, promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) y la Unión Internacional contra el Cáncer (UICC).

Este texto es solo informativo ante cualquier duda consulte a su médico.

Fuente: Organización Mundial de la Salud

FDP: 04/02/2022